Bueno chic@s, esta es mi nueva serie contemporanea. sobre
. Aqui va el prologo.
Prólogo10 de Mayo de 2009, Jacksonville, Florida
Solo quedaban 30 segundos, y el marcador indicaba que perdían por dos puntos. No podía permitirlo. No ahora. No en la final cuando había tanto en juego. Habían trabajado muy duro para conseguir llegar hasta allí, y no iban a amedrentarse ahora.
Sin desvelar sus intenciones a los jugadores del equipo contrario, observó a todo el mundo. Sus rivales habían dejado un hueco fuera de la línea de tres. Perfecto.
Sin pensarlo dos veces, corrió hacía allí lo más rápido que pudo. No les quedaba tiempo. Apenas 10 segundos. Uno de sus compañeros se dio cuenta de sus intenciones y le pasó la pelota. Dane la recibió, y mientras lo hacía giraba y saltaba en el aire para lanzar a canasta. Mientras sus pies volvían a posarse en tierra firme, observó como a cámara lenta como la pelota se acercaba en dirección a la canasta y entraba con un simple “Chof”, un segundo antes de que sonara el final del partido.
De repente, todo se convirtió en aplausos, gritos y gente lanzándose sobre él. Salió de su aturdimiento cuando sus compañeros lo levantaron para lanzarlo al aire.
Desde las gradas, uno ojos no apartaban la mirada de él. Vio como el equipo ganador se dirigía a los vestuarios y se levantó para dirigirse hacía allí. Había llegado el momento. Al fin había encontrado lo que llevaba tanto tiempo buscando.
*****
El vestuario parecía un gallinero. Todo gritos y exclamaciones alegres.
Cuando los jugadores vieron entrar a su entrenador, comenzaron a vitorear su nombre, haciendo que él hombre les sonriera e hiciera una inclinación con la cabeza en señal de agradecimiento.
- ¡Vale, chicos! ¡Ya basta! ¡Tenemos visita! – dijo el hombre, alzando la voz, para hacerse oír entre todas esas voces.- Adelante señor McQuinn – añadió cuando las voces se hubieron apaciguado –
La puerta se abrió, dando paso la leyenda viva del baloncesto y actual dueño de Los Sharks uno de los mejores equipos de la NBA, Peter McQuinn. Todos en el vestuario observaron atónitos como la gran leyenda del baloncesto, caminaba directamente hacía un objetivo concreto. Cuando hubo legado, se paró, y lo miró intensamente.
- Dane Slater, sería un honor para los Sharks contar con su presencia entre nosotros la próxima temporada. – le dijo sin más preámbulos - ¿Qué dices?
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(¬¬ odio estos monos)